Texto: 1 Roland Mousnier:
“La mayor
parte de los estados renacentistas evolucionan hacia la monarquía absoluta.
Existe ésta, cuando el rey, encarnando el ideal nacional, posee, además, de
hecho y derecho, los atributos de la soberanía: poder de hacer las leyes, de administrar
justicia, de percibir impuestos, de tener un ejército permanente, de nombrar (y
destituir) a los funcionarios, de hacer juzgar los atentado contra el bien
público, y en particular, de delegar jurisdicciones de excepción cuando lo
considera conveniente.
(...) la
idea de la monarquía absoluta se añade –sin destruirlas- a las viejas
concepciones de contrato y costumbre, reglamentando las relaciones de los reyes
con sus vasallos y súbditos. Estas relaciones templaron o moderaron el
absolutismo monárquico.
Los
grandes estados del Renacimiento son vivificados y unificados por un vibrante
patriotismo, que de un modo extraño se mezcla con el patriotismo local y con el
sentimiento de fidelidad al soberano.
(...) El
renacimiento del Derecho Romano ya había difundido –en el siglo XIII-, la idea
de un príncipe absoluto, que concentra todos los poderes en su persona y cuya
voluntad es la ley.
El
Derecho Romano debió su éxito al hecho de haber brindado fórmulas cómodas para
expresar las tendencias profundas de los contemporáneos.
Las
naciones (reinos) son una yuxtaposición de comunidades territoriales,
provincias, países, municipalidades, comunidades de lugares y cuerpos; como los
cuerpos de funcionarios, las universidades y las corporaciones de oficios. Con
todos ellos la monarquía tiene sus contratos, y cada comunidad tiene sus
privilegios, sus costumbres, sus reglamentos, su jurisdicción, sus bienes y sus
representantes. Cuerpos y comunidades se oponen sin cesar entre sí, por sus
intereses particulares. Es preciso que el rey sea bastante fuerte para arbitrar
sus conflictos y coordinar sus esfuerzos en vistas al bien común.
La
monarquía absoluta, es también resultado de la rivalidad de dos clases: la
burguesía y la nobleza. El rey, que necesita a los burgueses por sus finanzas y
componer su burocracia, obtiene su obediencia y apoyo. El poder real enriquece
a los burgueses con sus empréstitos, hipotecas, arrendamientos de impuestos,
monopolios de explotación y de comercio, etc. La nobleza sólo puede defenderse
mediante el favor del rey. (Se hace dependiente de los privilegios otorgados
por el monarca: cargos hereditarios en la oficialidad del ejército, pensiones
y, reforzamiento por el estado de sus derechos señoriales sobre los
campesinos.) Desde luego, la nobleza podía vivir en
sus tierras con las rentas en especie y los servicios de los campesinos; pero
le atraían mucho más la vida cortesana y los salones de las ciudades…De este
modo el aristócrata se ve obligado a colocarse al servicio del rey, a
solicitar, gobiernos en provincias o plazas fuertes, regimientos, compañías…En
esta lucha de clases radica, quizás, el factor del desenvolvimiento de las
monarquías absolutas".
Roland Mousnier "Los siglos XVI y XVII" Barcelona, Destino, 1981.
Texto 2: Perry Anderson:
“En el transcurso del siglo XVI, apareció en
Occidente el estado absolutista. Las monarquías centralizadas de Francia,
Inglaterra y España, representaron una ruptura decisiva con la soberanía
piramidal y fragmentaria de las formaciones sociales medievales, con sus
sistemas de feudos y estamentos.
Las
monarquías absolutas introdujeron ejército y burocracia permanente, un sistema
nacional de impuestos, un derecho codificado y los comienzos de un mercado
unificado.
Estas
características parecen ser eminentemente capitalistas y, coinciden con la desaparición
de la servidumbre (en occidente), institución nuclear del modo de producción
feudal en Europa.
Pero, el
fin de la servidumbre no significó, por sí mismo, la desaparición de las
relaciones feudales en el campo. Es evidente que la coerción privada
extraeconómica, la dependencia personal, y la combinación del productor
inmediato con los medios de producción, no desaparecieron necesariamente cuando
el excedente rural dejó de ser extraído en forma de trabajo o de entregas en
especie para convertirse en rentas en dinero, mientras la propiedad agraria
aristocrática cerró el paso a un mercado libre de tierras y a la movilidad real
de la mano de obra, las relaciones de producción rurales continuaron siendo
feudales.
Durante
toda la temprana Edad Moderna, la clase (social) económica y políticamente
dominante fue la misma que en la era medieval: la aristocracia feudal. Esta
nobleza tuvo una profunda metamorfosis durante los siglos siguientes al fin de
la Edad Media, pero, desde el comienzo hasta el final de la historia del
absolutismo nunca fue desalojada de su dominio del poder político.
Los cambios en las formas de explotación feudal que acaecieron al final de la época medieval no fueron en absoluto insignificantes; por el contrario, son precisamente esos cambios los que modifican las formas del Estado. El absolutismo fue esencialmente un aparato reorganizado y potenciado de dominación feudal, destinado a mantener a las masas campesinas en su posición social feudal tradicional, el estado absolutista nunca fue un árbitro entre la aristrocracia y la burguesia, ni mucho menos un instrumento de la naciente burguesía contra la nobleza, fue una nueva caparazón política de una nobleza amenazada"
Perry Anderson "El Estado Absolutista" Madrid, Siglo XXI, 2007.
Actividad:
1- ¿Cuáles eran las atribuciones del poder del monarca según Mousnier?
2- Según este autor, Qué relaciones existen entre el origen de la monarquía absoluta y el enfrentamiento entre la nobleza y la burguesía?, ¿Por Qué?(texto 1).
3-¿Qué diferencia puedes ver entre el planteo de Roland Mousnier y el de Perry Anderson(texto 2), en cuanto al origen del Estado Absolutista? Fundamente.
4- Explique el significado de la siguiente expresión de Anderson:
El
absolutismo fue esencialmente un aparato reorganizado y potenciado de
dominación feudal...
fue una
nueva caparazón política de una nobleza amenazada.”
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